Semanario "Todos Adentro"
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Un respiro entre tanto teatro ligero se está dando con el más reciente estreno de “El Enfermo Imaginario” del inmortal comediógrafo y actor francés, Jean-Baptiste Poquelín (Molière) en el Ateneo de Caracas. Un buen producto teatral que contó con la cuidadosa puesta en escena, una aceptable versión del texto original y la cuidadosa producción de Carmelo Castro que supo sumar para el grupo Thalía, los aportes escenográficos y de vestuario de Silvia Inés Vallejo que estampó su personal sello estilístico y sobriedad estética a fin de cohesionar la unidad estética general. Destacó igualmente, la visual otorgada por la artesanía de máscaras, utilería y prótesis de Andrés Eloy Izarra, los diseños de maquillaje e iluminación de José Manuel Ascensao y otros que en combinación profesional crearon un equipo humano donde también hay que aplaudir la labor de realización de Javier Le Febre, Altagracia Martínez y Enrique Tovar quienes permitieron la escenificación de una agradable referencia molieresca que da esa frescura de teatro clásico dentro de una marquesina saturada de teatro digestivo.
Y digo “respiro” o “alivio” es porque si bien en estos últimos tres meses la comedia ligera (que es buena que la haya) ha tomado demasiada fuerza y se hace obligante apelar por los valores esenciales del teatro de siempre. Con la escenificación de esta celebérrima comedia –llena de crítica social y fina sátira de la cultura burguesa- la historia nos refiere que en su 4ta representación hacia 1673, el autor caía mortalmente enfermo cuando representaba el papel de Argán. Ahora, esta jocosa trama y su fondo temático se revalida ante la mirada de neófitos y expertos como aliciente que debe ser catado con aplomo ya que ni estamos preparados para el alto nivel que exige la comedia francesa del siglo XVII pero que tampoco se debe apartar. Los temas y asuntos que trató Molière siempre serán vigentes ya que se comporta como vino viejo en odre nuevo. Claro está, Thalía entregó su mejor compromiso histriónico aunque este no haya sido dado por una plantilla totalmente de la casa, es decir, se constató el desparpajo y magnífica actitud compositiva de actores invitados y de siempre pero con resultados algo heterogéneo. Excelentes y con entrega la labor interpretativa de Salomón Adames (Argón), Norma Monasterios (Toñita), José Manuel Ascensao y Robert Castro.
Con ajustes en el ritmo general, con cierre de tuerca a lo ofrecido como composición de personajes dado por Flor Elena González, Erika Medina y Andreina Madrid, Luís Serrano y Xavier Muñóz se alcanzará un más alto desempeño histriónico que hará que "El Enfermo Imaginario" sea joyita lustrosa en el engarzado artístico del grupo Thalía.
Carlos Herrera
